Una ya es «condominio» y en otra venden casas por redes sociales: La situación de las tomas en Región de Valparaíso
Por Sofía Dib y Leonardo Vallejos
Fuente: Emol.com 15/11/2022
Placilla y Horcón son las sedes de usurpaciones a grandes terrenos privados. Los vecinos aseguran que son casas de veraneo o que demuestran un buen nivel socioeconómico
La región de Valparaíso es la primera con mayor cantidad de tomas ilegales con 255 –18.405 hogares-, según el Catastro Nacional de Campamentos (CNC) del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, seguida por Biobío (156) y la Región Metropolitana (142).
Últimamente se han conocido situaciones que viven los dueños privados de algunos terrenos como la familia Easton, en Colmo, o la constructora Pacal en Cartagena.
Y hay otras. Una, que ya parece un condominio con calles, conserje, panderetas, agua y electricidad, queda en Horcón, en la comuna de Puchuncaví. El terreno, de casi 17 hectáreas que se ubica frente al mar es propiedad de una comunidad de 81 carabineros en retiro y está ocupada por más de 200 familias desde el 6 de diciembre del mencionado año.
Según contó la dirigente de la toma -llamada Alto Rucalhue-, Marisol, al matinal Mucho Gusto de Mega, la motivación es tener un lugar donde vivir. «Es lo mismo que hace el sistema. Nos pone la pistola en la cabeza y no tenemos otra que condenarnos a vivir como vive toda la gente pobre (…) Hoy estamos en un periodo que queremos negociar, desde el principio fue esa nuestra intención».
Pero esas supuestas conversaciones con los dueños fueron desmentidas por Juan Valenzuela, el vocero de los ex carabineros. «Es imposible negociar con una pistola en el pecho. Si ellos hubieran querido negociar con nosotros habrían primero negociado y no haberse tomado el terreno (…) no podemos negociar con gente que está cometiendo un delito y se instalan ahí. No sé quiénes son, no sé qué patrimonio tienen, no sé nada de nada ¿Con quién voy a negociar?».
Al inicio, los dirigentes fueron cobrando una cuota de ingreso una adicional para reservar el lugar, con lo que realizaron todos los gastos referidos a la limpieza y la división de los terrenos.
En la otra toma, en Placilla Oriente, los dueños del terreno no quisieron dar la cara por miedo a represalias, algo común últimamente, luego del asesinato del empresario viñamarino, Alejandro Correa, por haber reclamado su predio.
En el terreno de Placilla, en la comuna de Valparaíso, viven actualmente unas 400 familias donde se deberían haber construido 300 viviendas sociales para la comunidad Rukapeuma.
Quienes sin han enfrentado la problemática a través de los medios han sido los vecinos colindantes a la toma. Rebecca Saavedra acusa que estas personas, chilenas y extranjeras, han ido ocupando el terreno en tres tramos y que les ha afectado con problemas de seguridad.
La particularidad de esta toma es que a través de redes sociales a quienes venden las casas, con costos desde seis a nueve millones de pesos.
En ambas ocupaciones los vecinos aseguran que son personas con buena situación económica, considerando la magnitud de las casas. «Se hicieron casas con fundaciones de concreto, con terminaciones de muy buena calidad, con fosas sépticas, con estanques de agua», comentó el habitante colindante a la toma de Horcón.
Mientras que Saavedra, hablando sobre una de las construcciones, señaló: «Toda su estructura es de fierro y por fuera tiene osb. Esa es una casa pre fabricada (…) Lo que llama mucho la atención es cómo la fabricas porque puedes levantar una casa prefabricada, pero también los accesorios que le adosas a esa casa le dan plusvalía. Allá hay una casa de no menos de 6 metros de largo por tres o cuatro metros de ancho que tiene ventanas de pvc». En la toma al lado de su casa los dueños hicieron una denuncia que aún no llega a ningún puerto.
En Horcón, los ex uniformados también siguieron ese camino judicial, pero además todos los trámites administrativos posibles. «Hemos tenido información de que se han colgado de la luz de Chilquinta. Nosotros hemos informado a Chilquinta, hemos informado a las aguas rurales de Horcón, hemos informado al ministerio de bienes nacionales, hemos hecho todo los trámites judiciales y administrativos correspondientes y después de tres años no hemos obtenido nada», indicó Valenzuela.
De hecho, en esa ocupación existe actualmente una orden de demolición firmada por la ex alcaldesa de Puchuncaví, Eliana Olmos, pero que no ha sido llevada a cabo hasta ahora ya que, como explica el actual edil, Marcos Morales, se debe esperar la resolución del Ministerio Público.
Por su parte, el seremi de Bienes Nacionales de Valparaíso, Tomás Covacich Iturbe, señala a Emol que «estamos al tanto de las múltiples denuncias que se han profundizado en los últimos días por las tomas en el Fundo Santa Rosa en Quillota y en Placilla Oriente en Valparaíso, pero ambos lugares corresponden a loteos irregulares, por tanto, Bienes Nacionales no puede generar regularización alguna de viviendas».
La autoridad agrega que «en el marco del Plan de Emergencia Habitacional, nosotros seguimos trabajando en un listado de terrenos para traspasar a Serviu que tengan factibilidad de uso habitacional, pero en el caso de tomas o loteos brujos en terrenos privados, es poco lo que podemos hacer. Para detener este proceso, los municipios a través de las DOM, SERVIU y los dueños de los terrenos son claves. Ellos tienen las facultades de denunciar y fiscalizar los loteos y asentamientos irregulares que se generen en estos sectores, para que, como Estado, podamos generar mecanismos multisectoriales para la regulación y soluciones habitacionales dignas e integrales».