“Representa la diversidad social y cultural del país”: El impacto del arribo del presidente Gabriel Boric al Barrio Yungay
Por Lorena Moreno Berroeta
Fuente: diarioUchile 12/03/2022
La decisión del Mandatario ha provocado una revalorización de este olvidado sector del centro urbano que es considerado el primer barrio republicano de Santiago. Mientras, las comunidades siguen luchando por una protección patrimonial que permita cultivar la memoria de este histórico espacio.
“El Presidente optó por un barrio que tiene una tremenda una lucha de defensa del territorio y del patrimonio que ha generado, además, un referente nacional e internacional con una historia como el primer barrio republicano de Santiago”.
Así resume la actual concejala de Santiago y vecina del Barrio Yungay, Rosario Carvajal, la sensación de orgullo que embarga a la comunidad de este sector céntrico de Santiago desde que se conoció el arribo del presidente Gabriel Boric a una antigua casona patrimonial ubicada en calle Huérfanos, entre Libertad y Esperanza. En esta casona, el Presidente vivirá junto a su pareja, Irina Karamanos, y desde el 11 de marzo es conocida como la residencia presidencial.
“Es una tremenda señal política que un Presidente de la República opte por vivir en el sector poniente de la ciudad y no como en los últimos 60 años, donde Presidenta y Presidentes han vivido en el sector oriente encapsulados en barrios que son bastante perfectos. Es un barrio que tiene una historia y personajes que se conectan mucho con el perfil del presidente Gabriel Boric”, señaló Carvajal, que se describió a sí misma como “nacida y criada en el Barrio Yungay y yungaina al cien por ciento”.
En ese sentido, la concejala explicó que el trabajo de la organización vecinal, que comenzó hace más de 16 años, permitió que el Barrio Yungay fuera declarado como zona típica de Chile por el Consejo de Monumentos Nacionales en el 2009. Y, en ese contexto, la elección de Gabriel Boric fue un espaldarazo al trabajo de resguardo patrimonial realizado por la comunidad de este sector de Santiago.
“Viene a reforzar toda esa lucha de protección de un barrio que se caracteriza por su organización, por ser un barrio diverso y popular, con gran cantidad de familias migrantes. Cuando el Presidente Gabriel Boric opta por el Barrio Yungay, opta por todo eso, y por la historia y trayectoria de lucha del movimiento vecinal que ha sido capaz de frenar la especulación inmobiliaria”, comentó.
En esa línea, el Barrio Yungay avanzó como opción para la residencia presidencial debido a las características exigidas por el equipo de seguridad que resguarda al mandatario que, entre uno de los aspectos, se referían al riesgo de los edificios en altura que posibilitarían un eventual ataque armado. Algo que en el Barrio Yungay escasea debido a la declaración de Zona Típica, que sólo permite construcciones de 4 pisos, es decir, de un máximo de 12 metros de altura.
En ese contexto, el arquitecto y director del centro de estudios Espacio Público, Sebastián Gray, aseguró que la decisión presidencial, además de la seguridad que brinda el lugar, es un guiño a la realidad social de Chile.
“Gabriel Boric está dando una señal muy fuerte a la opinión pública, en el sentido de establecer la residencia presidencial en un barrio que hoy representa la diversidad social y cultural del país. Creo que ese es el principal mensaje que da su decisión”, explicó Gray en conversación con nuestro medio, y detalló que “el Presidente buscó, en distintos barrios de Santiago, un lugar adecuado, no solamente en términos del tamaño o la calidad de la casa, sino su ubicación con respecto a su trabajo que está en el casco histórico del Palacio de La Moneda, con consideraciones de seguridad y servicios”.
En esa línea, Gray destacó que si bien “el Barrio Yungay se ha empobrecido en el tiempo”, actualmente “sigue siendo un excelente lugar para vivir, porque hay infraestructura, las calles funcionan perfectamente bien y hay muchos edificios en muy buenas condiciones”, y para el arquitecto, el impacto de esta decisión en el Barrio Yungay “es positivo”, ya que el hecho que exista este vecino importante con un dispositivo de seguridad permanente en torno a él “significa que, por lo menos, en un cierto radio de influencia el barrio inmediatamente se convierte en un barrio más seguro”.
“Eso puede tener efectos psicológicos en las comunidades que viven actualmente ahí, en el sentido de sentirse más seguros, más tranquilos, porque el barrio se revaloriza desde un punto de vista simbólico”, indicó Gray, y recalcó que es difícil un aumento de especulación inmobiliaria en la zona, “porque las inversiones obedecen a otras lógicas que son más a largo plazo, y tienen mucho más que ver con instrumentos de planificación como los planos regulares, que visan lo que se puede hacer legalmente o no”.
En ese ámbito, la concejal Carvajal ahondó en falencias que durante años afectaron a la comunidad del Barrio Yungay y que, en la actualidad, han significado avances en muy poco tiempo luego de la confirmación de la llegada de Gabriel Boric, como la instalación de fibra óptica en las casas del sector. “Hace dos años denunciamos en la Superintendencia de Telecomunicaciones que las empresas se negaban a entregar el servicio de fibra óptica a las casas, pero a los edificios en altura y a los locales con giro comercial sí les daban el servicio, entonces había una discriminación. Y hoy, desde conocida esta noticia, eso está cambiando”, expuso, y aseguró que es una apreciación compartida por la comunidad.
“Es la opinión de muchos vecinos y vecinas que la llegada del Presidente traerá beneficios para la comunidad y para el barrio”, comentó Luis Henríquez, más conocido como Mico, a Diario y Radio Universidad de Chile.
El emblemático ilustrador es vecino del Barrio Yungay, y aseguró que la seguridad ha sido una de las mayores preocupaciones de la comunidad, debido al constante abandono por parte de la anterior alcaldía encabezada por Felipe Alessandri, que se reflejó en constantes delitos en diversos puntos del sector, por eso observan de manera positiva el arribo del nuevo vecino.
“La llegada del Presidente Gabriel Boric inmediatamente cambia ese panorama, con patrullajes 24/7 en todo el sector y no solamente la cuadra donde él vive. El control policial se ha notado sin importunar a los vecinos, porque la sola presencia de Carabineros ha traído más tranquilidad para nosotros”, sostuvo Henríquez.
Sin embargo y fuera de micrófono, desde la comunidad también aparecieron voces que aseguraron que con la llegada del Presidente se erradicaron las carpas instaladas por personas sin techo en diversos sectores del Barrio Yungay, principalmente en la Plaza del Roto Chileno y en el Parque Portales. Al referirse a esta situación, Carvajal explicó que permanentemente existen denuncias de la comunidad por conflictos en estos espacios y que el Municipio de Santiago realiza un trabajo de seguimiento de los casos para apoyar a estas personas. “Sólo cuando hay casos asociados a delitos interviene la policía”, aseguró.
“Lo que se generó cuando se conoció la llegada del Presidente es que los rucos del Parque Portales cambiaron sin que existiera una intervención, y después sí hubo una intervención municipal, pero esas intervenciones son permanentemente solicitadas por vecinos y vecinas”, explicó la concejala, y agregó que “tenemos muchos testimonios de mujeres que han sido acosadas y amenazadas, como testimonios de riñas permanentes y violencia hacia mujeres en situación de calle”.
Al abordar el aspecto de la seguridad en el sector, Rosario Carvajal explicó que el impacto se provocó “desde el momento de conocerse la noticia”, pero la coordinación con las policías aumentó con la llegada de Gabriel Boric al Barrio Yungay ya que “los anillos de seguridad son en torno a cuatro o seis cuadras, y ahí se ha generado un perímetro más seguro”.
“Nosotros esperamos que eso se amplíe para el resto del Barrio Yungay y que no sea solamente porque aquí vive el Presidente, sino que sea para toda la comuna y sea la seguridad que se le entregue a todos los barrios de Chile. En ese sentido, es muy bueno que el Presidente escoja un barrio que tiene los problemas de la mayoría de la población y los barrios de Chile”, expresó Carvajal y destacó el protagonismo que tendrá el territorio de esta parte de Santiago.
“El Barrio Yungay será su cable a tierra, su nexo con la realidad y eso le dará una experiencia cotidiana al Presidente que debe liderar la política pública. Me parece que es fundamental, porque lo peor es que las autoridades se encierren en barrios privilegiados del sector oriente”, expuso, y aseguró que “lo mejor es que las autoridades se puedan conectar con los problemas y con el Chile real”.
Y en ese sentido, Mico coincidió con Carvajal, y reconoció que “este hecho ayuda mucho a quitarle el estigma de que este era un barrio que estaba siendo coaptado por la delincuencia o el narcotráfico, microbasurales y otros problemas urbanos”. Además, aseguró que “los problemas se pueden resolver de mucha mejor manera con el evidente interés de las autoridades locales, regionales y municipales de mejorar el entorno del Barrio Yungay a propósito de la presencia del Presidente”.
Y en otro aspecto, Carvajal también destacó la recuperación de la economía barrial, ya que el Barrio Yungay comenzó a recibir visitas de personas interesadas en conocer su historia. En ese sentido, los cafés y bares volvieron a abrir sus puertas, ya que se vieron muy afectados por la pandemia del Coronavirus y, al salirse de su rol de la concejalía, la vecina Rosario reconoció que “nos costó dimensionar” que el Barrio Yungay estuviera dentro de las opciones para recibir al Presidente Gabriel Boric.
“Sentimos felicidad y mucho orgullo porque genera un impacto en el autoestima de la gente y también del patrimonio de Chile. Es una señal muy importante para los barrios patrimoniales, porque lo que es bueno para el presidente, es bueno para cualquier ciudadano y ciudadana del país”, comentó, y visiblemente emocionada añadió que esta decisión “nos pone en valor, porque uno de los componentes más importantes que tiene Yungay es el tejido social y es lo que hemos intencionado desde el movimiento de defensa del patrimonio”.
Además, Mico coincidió con la necesidad de resguardar el tejido social de este histórico lugar ya que, en el contexto del estallido social, se generaron una serie de colectivos integrados por las propias comunidades autoconvocadas que, entre otras actividades, colgaron de ventanas o balcones coloridos carteles que exigían una nueva Constitución o llamaban a votar por el Apruebo. En ese contexto, Mico se refirió a “Acción Territorial Yungay”, colectivo que integra y que el pasado fin de semana instaló un lienzo en la Plaza del Roto Chileno para dar la bienvenida al nuevo vecino.
“Más que impulsados por un ámbito partidista, es un ánimo político social. Como vecinos que somos, intervenir el barrio de esa manera es para informar, motivar y dar más luces a los vecinos acerca de cómo participar y hacerse parte de estos procesos”, explicó Mico, y enfatizó en la importancia de esta agrupación para mantener la unión de la comunidad de Yungay.
En esa línea de resguardo de la memoria y el patrimonio, Sebastián Gray restó importancia a las reacciones que surgieron, principalmente desde las redes sociales, debido al tipo de casa elegida por el mandatario, y aseguró que “las críticas son absolutamente infundadas”.
“Las casas son grandes y esa casa en particular no es, por ningún motivo, una casa muy lujosa comparada por otros palaciotes que sí hay en el Barrio Yungay”, y recalcó que la construcción cumple con la logística necesaria para un Presidente y sus actividades, así como también para la instalación de todas las medidas de seguridad que resguarden su protección. En ese sentido, el arquitecto destacó la protección patrimonial que existe en ese histórico lugar de Santiago, ya que es un espacio de memoria para este país.
“El Barrio Yungay ha conservado el paisaje urbano, un tipo de ciudad de un momento histórico de Chile y eso tiene mucha significación. Por decirlo de alguna manera, es un lugar bonito para vivir porque, aunque sea pobre o esté venido a menos, sigue teniendo grandes valores que, con el tiempo, se pueden ir rescatando como ha ocurrido en muchísimos barrios de muchísimas ciudades del mundo”, reflexionó Gray.