Pobreza, récord de contagios y aumento de la contaminación: la bomba de tiempo que no se ha logrado desactivar en Temuco
Por Felipe Saleh
Fuente: El Mostrador 13/04/2020
En la región, que tiene el más alto nivel de infectados después de la Metropolitana, se dan todos los elementos de una ecuación demasiado compleja. Altos índices de pobreza y factores culturales que tornan difícil cumplir la cuarentena. Población rural sin acceso a información oportuna. Débil infraestructura para atender a los enfermos y carencia de insumos de protección, lo que se refleja en una cantidad creciente de trabajadores de la salud que están contagiados y pueden dejar sin personal al sistema. Todo ello, junto al empeoramiento de la calidad del aire, debido al uso masivo de calefacción a leña, cuyo material particulado podría servir de vehículo para transportar contaminantes, aumentando seriamente el riesgo, de acuerdo a los últimos antecedentes científicos de la U. de Harvard, que relaciona mortalidad por COVID-19 y contaminación atmosférica.
Es poco frecuente que una organización gremial de la salud esté de acuerdo con las autoridades. Pero el COVID-19 consigue este tipo de excepciones. Gabriela Flores, presidenta de la Confederación de Funcionarios de la Salud Municipalizada (Confusam) coincide con el alcalde de Temuco, Miguel Becker, al identificar la razón del alto contagio en la ciudad y en la Región de La Araucanía. “Es increíble que aunque esté en juego la vida de las personas, hay muchas que simplemente no obedecen, no les interesa, no lo cumplen”, dice el alcalde. Por su lado, la dirigenta asegura que “la población no ha tomado en serio el hecho de no salir. La gente cree que esto es un paseo”.
Las cifras no admiten dudas. Según los números del Ministerio de Salud (Minsal) entregados al 12 de abril, La Araucanía tiene 775 casos confirmados. Es la segunda región con más contagios después de la Metropolitana, pero la primera respecto de la tasa de incidencia, de 70,2% por cada 100 mil habitantes contra un 39,3% de la Región Metropolitana, según el informe epidemiológico del Minsal publicado el 10 de abril.
La avalancha de desigualdad
Por eso el peligro de un desborde en los contagios se ve muy real. “Estamos muy ajustados en ventiladores, han llegado 30, pero la situación no es para nada holgada, estamos en una situación muy delicada. Todo lo que se haga va a ser poco para cuando llegue la avalancha, ese es mi pensamiento de verdad. Todo va a ser poco para cuando llegue el momento y las personas que requieran de atención con equipo de respirador comiencen a requerirlo y tengamos que decidir quién vive o quién muera a propósito de su estado de salud o su edad. No ha ocurrido todavía y tenemos que seguir haciendo esfuerzos para que no ocurra”, subraya el alcalde de Temuco.
La situación de la epidemia en La Araucanía también es una muestra de la desigualdad social y económica que vuelve a expresarse en el contexto de la propagación del virus. Ejemplos de esto son los siguientes:
Desde el 22 de marzo una funcionaria administrativa del Departamento de Salud de Gorbea se encuentra contagiada. Hoy está estable dentro de su gravedad en el Hospital Regional en Temuco. La mujer está afectada de una fibrosis pulmonar, sumando a esto a otras condiciones de salud. El equipo médico decidió no conectarla al ventilador más avanzado que está disponible en el hospital. “Las gestiones que hice por ella fueron para que la conectaran a un respirador especial que hay en Temuco. Hablé con el ministro para que interviniera. Se hicieron todas las gestiones, pero la compañera tiene un problema en los pulmones, por lo tanto, no se le pudo conectar”, revela Gabriela Flores de la Confusam.
Por otra parte, durante la tarde del 5 de abril un avión Hércules de la Fach trasladó al nefrólogo de 61 años, Marcelo Calderara, contagiado de COVID-19, hasta Santiago. Según la Fuerza Aérea, “el requerimiento para el operativo aéreo fue realizado por el Servicio de Salud Araucanía Sur a las autoridades regionales correspondientes, dado el cuadro de insuficiencia respiratoria aguda severa por COVID-19 y un franco deterioro clínico del paciente”. El ministro Jaime Mañalich que, en principio, justificó el procedimiento como “una decisión privada”, luego anunció un sumario en el servicio de salud, después que la Contraloría General de la República pidiera antecedentes a la Fach.
Temuco versus Las Condes
El caso de Temuco, fuera de las comunas periféricas de Santiago, es especialmente ilustrativo respecto de cómo la epidemia afecta con mayor fuerza a las zonas más pobres del país. El colectivo de estudiantes Brigadas Territoriales elaboró con datos públicos una serie de infografías en las que comparó la situación de Las Condes, otra comuna con alto contagio (281 casos para 330 mil habitantes), versus Temuco (443 casos al 10 de abril para poco más de 300 mil habitantes)
De esta forma, el ingreso promedio per cápita en Temuco es de $219.700 contra los $953.100 de Las Condes. Respecto del “índice de pobreza multidimensional”, en la capital de la Región de la Araucanía es de casi un 19%, mientras que en Las Condes alcanza un 4,83%.
Otras cifras que explican el alto contagio en Temuco, y el peligro de que se expanda en una zona especialmente vulnerable, son: el índice de personas sin acceso a servicios básicos, que es de 9,5%; el indicador de hacinamiento, con un 15,6%; y el porcentaje de viviendas sin una habitación por persona, que es de 20,3%.
Según los autores del análisis que comparó a Las Condes con Temuco, “existe una importante diferencia en las condiciones con que enfrentan la pandemia estas dos comunas. De ahí incluso las condiciones de hacinamiento, acceso a la salud, ingresos per cápita e, incluso, ámbitos que aún no proyectamos, como lo laboral, pueden incrementar la brecha entre ambas y con ello su respuesta ante la crisis. En este sentido, no es casualidad que la pandemia afecte más a una comuna que a otra, tan solo revisando este compilado estadístico. Creemos que la pandemia lo que ha hecho es develar con aún más crudeza la enorme desigualdad existente en este país entre las condiciones de vida de ricos y pobres”.
Bomba económica
En efecto, uno de los aspectos que más alarma a las autoridades es el impacto económico no solo en Temuco, sino en toda la zona del Wallmapu.
Juan Carlos Reinao, alcalde de Renaico, en la provincia de Arauco, y presidente de la Asociación de Alcaldes Mapuche, afirma que “debemos ser conscientes que el nivel de pobreza va a aumentar de manera considerable en la Región de La Araucanía».
«Es claro que no estamos preparados para esta pandemia, ni para enfrentar, en ningún ámbito, el mañana. Los centros de salud de la región nunca estuvieron preparados para esto, lo que refleja una desigualdad tremenda”, afirma Reinao, de formación médico. “La infraestructura hospitalaria es muy débil, hoy día existen solo 3 hospitales de alta complejidad, de los cuales uno tuvo que ser ‘inaugurado’ de forma apresurada para abordar esta contingencia y, a pesar de ello, estos centros se van a ver desbordados ante esta situación”, subraya Reinao.
El alcalde se refiere al hospital de Padre Las Casas, segunda localidad con más contagios en la región y donde el Presidente Piñera inauguró una parte del centro asistencial, con 39 camas de las 220 proyectadas. En el hospital de Angol también se implementó un espacio especial para recibir personas contagiadas.
El resultado de la ecuación, que incluye factores culturales con la falta de insumos para los centros de salud, más los elementos culturales y económicos, puede ser demoledor si al menos no se puede controlar con total eficiencia al menos uno de ellos.
El aspecto sanitario ya constituye un problema crítico. “Hay falta de insumos, elementos de protección. Lo que más hemos reclamado como organización es la falta de elementos de protección. El Gobierno habla de 52 mil millones para la atención primaria, pero lo que dicen los dirigentes es que este presupuesto no se ha visto reflejado. La gente está trabajando con guantes quirúrgicos y mascarillas de mala calidad”, dice Gabriela Flores de la Confusam.
Como ejemplo patético circuló el video de una funcionaria cubriendo su ropa clínica con retazos de bolsas de basura. Flores además señala que en la región ya se registran 20 funcionarios contagiados y otros 20 en cuarentena, sin que haya relevo asegurado. “Nos preocupa que, si tenemos muchos, quién va a atender a la población”, recalca.
Contaminación por combustión a leña
El Estudio de Carga Mundial de Morbilidad (Global Burden of Disease), realizado por investigadores de la U. de Harvard, identificó la contaminación del aire como un factor de riesgo para la mortalidad por enfermedades cardiovasculares y totales hasta el punto de hacerle responsable cada año de unos 5,5 muertes prematuras en todo el mundo.
La contaminación sería entonces una agravante que podría empeorar el estado de salud de los pacientes afectados por la pandemia. El aumento de un micrómetro de partículas finas (PM2,5) por metro cúbico de aire estaría asociado con un incremento de un 15% de la tasa de mortalidad por COVID-19.
Para llegar a estas conclusiones, los investigadores realizaron un recuento de todos los fallecidos por coronavirus en todos los condados de Estados Unidos y cruzaron los datos con los promedios de niveles de contaminación –expresados en la concentración de partículas PM2,5– entre los años 2000 y 2016. «Los resultados sugieren que la exposición a largo plazo a la contaminación del aire aumenta la vulnerabilidad a experimentar los resultados más severos de COVID-19».
Francisco Cereceda, de la U. Federico Santa María y experto en química atmosférica, explica que ciertas gotitas que expelen las personas contagiadas podrían ser muy pequeñas y comportarse como aerosoles, con tamaños parecidos a las partículas ultrafinas, pudiendo ser parte del material particulado fino del aire contaminado, funcionando como vehículo portador para muchos contaminantes, incluidos los virus como el SARS-CoV.
De acuerdo a esta lógica –argumenta Cereceda– con condiciones invernales de bajas temperaturas y existencia de material particulado en el aire contaminado, «el virus encontraría un ambiente más propicio para prolongar su vida media y su propagación».
Debido a estas condiciones, el director de Centro de Tecnologías Ambientales afirmó que estamos frente a un «cóctel explosivo”, que podría favorecer la duración e ingreso del virus a nuestro organismo, generando un escenario más negativo que el que se ha dimensionado, sobre todo si el punto máximo de la curva coincide con los problemas de contaminación del aire en los próximos meses.
«Esto adquiere una relevancia mayor en las ciudades del sur de Chile, como Temuco, donde la mala combustión de leña es ya un problema endémico y en donde hay una serie de planes de descontaminación en curso, los cuales muy probablemente el Gobierno deberá acelerar para intentar minimizar los efectos antes mencionados», acota.
Funcionarios sin protección
Una diagnóstico en el mismo sentido hace Alex Manosalva, funcionario del consultorio Miraflores, en el centro de Temuco. «La única forma de parar el contagio es asegurar la contención de los trabajadores de la salud. Asegurando que todos los consultorios tengan EPP (Elementos de Protección Personal) y, por ahora, no están. Si no están, nos vamos a contaminar nosotros, los funcionarios. Si nos contaminamos, quién va a atender después a la población”, plantea.
Manosalva, Trabajador Social en el área de salud mental del consultorio, explica que “la gente no está familiarizada con Internet. No todo el mundo tiene Internet, conexión y un teléfono con Internet. La gente no tiene cómo meterse a Internet para pedir el permiso. Eso es un factor. Además, es muy difícil la cuarentena total, porque aquí hay gente que trabaja en el día a día. El nivel de sueldos es bajísimo. Hay personas que están siendo despedidas o que no les van a pagar los días no trabajados, entonces, ¿de qué viven? Esa gente va a salir a la calle a buscar el sustento”, asegura.
En esta línea trabaja el equipo del alcalde de Temuco, Miguel Becker, tratando de implementar medidas para evitar que las personas salgan de sus casas. Por ejemplo, para el cobro de pensiones “estamos con un programa de apoyo para nuestros adultos mayores para que no salgan de sus casas. Entonces, les vamos a buscar la plata con una persona autorizada, identificada, parte del equipo municipal”, dice.
También la municipalidad afirma que trabaja en la provisión de alimentos. «Salimos con la lista de supermercado o a la farmacia y las llevamos a domicilio. Tenemos cajas de alimentos para las personas. Nos contactan, nos piden una caja de alimentos, se hace el informe social y se les entrega a domicilio. Por último, queremos implementar una suerte de kiosco delivery, en donde el almacenero del sector genere un sistema de entrega a domicilio”, detalla Becker.
Pero el alcalde sabe que estas medidas no serán suficientes para contener a la gente, el único camino probable ante la fragilidad del sistema de salud que, con una cifra creciente de contagiados como ha sido hasta ahora, no será capaz de entregar la atención requerida. Por eso, “nosotros solicitamos algunas cosas adicionales, como por ejemplo adelantar el toque de queda. Es una de las medidas que estamos pidiendo al jefe de la plaza y a la delegada presidencial [Andrea Balladares]”, concluye el alcalde de Temuco.
Dentro de “la gente” que no tomó en serio la gravedad de la situación sanitaria está el caso más emblemático de contagio en la zona. Tomás León, de 29 años, se embarcó en un vuelo de Santiago a Temuco, estando contagiado. Caso similar a la de la Seremi de Salud Katia Guzmán, que incluso ofreció un punto de prensa estando infectada. Junto con ella se habrían contagiado unos 30 funcionarios de la repartición. Todas estas situaciones están siendo investigadas por la Fiscalía Regional.