Déficit habitacional: La región del Biobío cuenta más de 32 mil hogares en condiciones precarias
Por Glenda Ahumada
Fuente: La Tribuna 23/05/2022
La situación de hacinamiento y viviendas allegadas en Chile ronda el 47%, mientras que en la región del Biobío la cifra asciende a 57,2%.
El estudio realizado por Déficit Cero y el Centro de Políticas Públicas de la Universidad Católica reveló datos más detallados sobre la falta de vivienda en todas las regiones del país.
*En Chile existen más de 6 mil familias que no tienen acceso a una vivienda digna y, específicamente en la región del Biobío, la cifra es más preocupante ya que 32 mil hogares viven de allegados, hacinados o el inmueble se encuentra en condiciones irreparables.*
Clemente Larraín, coordinador de estudios de Déficit Cero declaró: “Otro aspecto que llama la atención es que en la región, en promedio, la edad de los jefes y jefas de hogar llega a los 43 años, lo que corresponde a la mayor edad promedio en todo el país. Además, existe una fuerte presencia femenina liderando hogares que están allegados o en viviendas irrecuperables”.
Esto refleja la urgente necesidad de plantear diversas soluciones que se adapten a la particularidad de cada familia. Al respecto Larraín añadió: “Hoy las personas pasan de no tener vivienda a la casa propia y tenemos que buscar los mecanismos para que en este tránsito existan soluciones intermedias, que permitan que todas las familias tengan acceso a una vivienda digna”.
CAMPAMENTOS
De acuerdo al Catastro Nacional de Campamentos de Techo Chile, hay 122 asentamientos irregulares en el país que albergan a más de seis mil familias y la mayor concentración de ellos, están en las comunas de Lota, Talcahuano, Concepción y Los Ángeles.
A su vez, la situación de la provincia respecto a los campamentos y viviendas construidas en “tomas” de terrenos es inquietante. Según registros del Serviu Biobío son 28 campamentos que abarcan 828 familias del territorio; Los Ángeles cuenta con siete.
Acerca del estado en que se encuentran los campamentos se constató que un 72% de las personas que viven en ellos, consideran que las viviendas están en mal estado, solo un tercio cuenta con electricidad a través de medidor propio y menos del 10% tiene acceso a la red de alcantarillado.
El aumento de los domicilios informales y campamentos solo evidencia que hay una emergencia habitacional en la zona que debe abordarse de manera integral con foco no solo en construir viviendas definitivas sino que además establecer políticas de acompañamiento de las familias en periodo de transición del campamento hacia la formalidad.
PROPUESTA DE TRABAJO COLABORATIVO
Claudio Nitsche, vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción indicó: “No podemos perder el foco de que afecta a todas las regiones, son casi 650 mil soluciones habitacionales las que se necesitan y se necesitan en un plazo razonable. Es por esto, que esta maratónica tarea no puede realizarse solamente por un organismo: Estado, el mundo privado y las instituciones y sociedad civil debemos trabajar coordinados para cumplir el compromiso de encontrar los mecanismos y los medios que permitan proponer una política habitacional que perdure en el tiempo y, sobre todo, que permita lograr el desafío de terminar con esta urgente falta de viviendas que enfrenta el país. En resumen, tiene que convertirse en una política de Estado y no en un programa de gobierno”.
Otro factor importante a considerar es la heterogeneidad de las familias que requieren una vivienda, lo que significa que para plantear soluciones a este problema se debe conocer información detallada de los grupos que las componen y abordarlo de manera colaborativa entre municipios, gobierno y mundo privado.
Una alternativa que brinda el Ministerio de Vivienda y Urbanismo a través del Serviu es el Subsidio de Arriendo, que es una ayuda temporal para realizar el pago mensual de una vivienda. Además, el beneficio permite el cambio de vivienda a cualquier región del país y postular, en futuro, a un subsidio para la compra de una vivienda definitiva. Actualmente son 86 las familias de la provincia que cuentan con este aporte.
Los desafíos que plantea el derecho a la vivienda digna y de calidad son sin duda complejos, pero se espera seguir avanzando en medidas que amortigüen y minimicen dicho problema.